Desedimentar y sedimentar

así, con propulsión y forma,

con vegetación y antagonía.

Como quien finca los límites 

de un tratado imaginario,

como quien constituye una roca ígnea

Los mapas ofrecen una geología intrincada.

El arbusto, el árbol y la piedra pertenecen. 

Es la relación intrínseca de ser,

de erigirse sobre lo que está y sobre lo que no está.

Donde no existe nada, uno es dueño de todo.

La biznaga, la víbora, la piedra, el pozo, el algodón;

¡y decían que esto era un desierto!

Estos son los territorios de la idiosincrasia de la clase alta,

este desierto.

En escarbar las capas del tiempo, se conoce la eternidad.